No pertenezco a una familia que sea millonaria ni tampoco vengo de una familia normal, porque de normales tampoco tenemos nada (risas) quizás tengo una de las personalidades más extrañas que tiene la familia, porque la verdad es que no me parezco a ninguno, pero para alivio de mi familia nadie me entendía en la escuela, y después nadie me entendía en el trabajo (risas) me encantaba pasar mucho tiempo sola, desde muy niña tenía ese hábito delicioso de hacer mi propia ley.
Siempre hago todo a mi manera, me da paz y también alegría,
me encanta saber que si triunfo es por mi y si fallo es por mi.
No tengo muchas dudas de eso.