Todavía no encuentro todas las respuestas.
Todavia llevo tres horas en frente de la pantalla sin escribir. Bailar en la oscuridad me da seguridad para relajarme y respirar. Me suelto mentalmente y dejo que me lleven los impulsos sórdidos y delirantes mientras el coro me explota en los oídos. No tengo todas las respuestas.
El universo canta y yo lo escucho, porque canta para todos nosotros.